Ideal que una cola de equino golpea como un espantamoscas, descendemos y somos amados, no importa si el corazón es incapaz de saciar una vagina, si nuestra angustia no es penetrada por una necesidad.
Ideal que unha cola de equino golpea como un corre moscas. Descendemos e somos amados, non importa se o corazón é incapaz de saciar unha vaxina, se a nosa angustia non é penetrada por unha necesidade.
el erizo que quiso copular con un globo
ResponderEliminarMe agradan todas las cópulas marinas, aunque las formas no se adapten al pecado. Tal vez el poema sea inconsecuente y lo verdaderamente importante es el comentario que nos aguarda, y otras veces una espada verbal no quiere herir a nadie.
ResponderEliminarno nos queda, lo hemos transferido a las máquinas
ResponderEliminar¿El coito o el amor?
ResponderEliminarel amor, claro, el coito siempre perteneció al automatismo biológico
EliminarQuizás las máquinas aprendan a amar mejor que nosotros a automatizar, pero entonces ya no serán máquinas, serán otra cosa...
ResponderEliminar