ESCRITOS


18/8/19

Nunca podremos plantar tubérculos en las constelaciones sin el pertinente abono, adiós definitivamente al árbol del pan y al vino de la ciencia. Vivimos en una isla y creemos que la Tierra está deshabitada. Vivimos en la Tierra y creemos que el universo es un erial. Estamos solos en un punto indecente de la nada, estamos olvidados en Laniakea. 
El paraíso es estercolado por los Dioses a diario, igual que un planeta arbitrario o el trisquel de una galaxia. 
Observé a una criada tirar de la cisternas y lavar los urinarios para desincrustar la firma divina de los inconmensurables retretes; más ella no es el principio de la creación, es la parte  irreal que me mantiene atado a este sueño. Quien ama estrellas únicamente desea abrasarse, quien recrea soles es imposible que no esté bronceado.   

2 comentarios:

  1. Quien se sumerge en el mar sueña con unicornios lascivos que buscan penetrar con su cuerno a Penélope, la reina de Ítaca, antes de que Ulises vuelva... pero en este caso no volverá. Contaremos la historia del revés y el héroe fracasará y no volverá a tener crédito en El Corte Ingles en la campaña de primavera, en esos ocho días de oro. Y tampoco se bronceará. Yo lo vi.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si no regresa, Penélope lasciva se hará con todos los Unicornios, las tiendas de los chinos en Ítaca y el oro de los españoles en el Nuevo Mundo.

      Eliminar