ESCRITOS


25/12/15

    Aquí, en esta matemática del ritmo,
    es preciso dar un tajo al silencio y callar.



Vázquez Davila


Con aliento se decapita el aliento, el sexo de la guillotina y las convexidades. No quiero que me tengáis en vuestros círculos, únicamente en la susceptibilidad del cortejo. Ya los dedos no atusan cabellera ni arguyen buenas ideas, mas a nadie se le debe ocultar el pensamiento de una mente despoblada. La ceniza y la borraja tienen algo que se esparce en la invariable infinita.
Cincelar una espalda es tarea de escultor: a golpes de cincel se tararea el vértigo y nada sucede más útil que un estéril poema.
Los Dioses nos hablan sin ambages en la interpretación de los astros y la piedra acaba pareciéndose a la eternidad en la piedra.
Tengo que reconocer que las únicas manos dignas huelen a pescadera y la sombra herida de tus ojos contiene el estanque de los peces.
El plagio es la parte más honesta de la personalidad y se acomoda siempre a nuestra vanidad. Qué tan largo, en la niñez, una inutilidad nos previene, pues la superioridad de un hombre es un mito de su vestimenta, una mirada circunstancial al devenir de los ángeles.


Aquí, nesta matemática do ritmo,
é preciso dar un tallo ao silencio e calar.


Vázquez Davila



Con alento decapita-se o alento, o sexo da guillotina e as convexidades. Non quero que me teñades nos vosos círculos, unicamente na susceptibilidade do cortexo. Xa os dedos non acicalan cabeleira nin argumentan boas ideas, mais a ninguén se lle debe ocultar o pensamento dunha mente despoboada. A cinza e a borralla teñen algo que se esparexa na invariable infinita.
Cicelar unhas costas é tarefa de escultor: a golpes de cicel salmodia-se a vertixe e nada acontece máis útil que un estéril poema.
Os Deuses falan sen ambaxes na interpretación dos astros e a pedra acaba semellando-se á eternidade na pedra.
Teño que recoñecer que as únicas mans dignas cheiran a peixeira e a sombra ferida dos teus ollos contén o estanque dos peixes. O plaxio é a parte máis honesta da personalidade e acomoda-se sempre á nosa vaidade. Que tan longo, na nenez, unha inutilidade prevén-nos, pois a superioridade dun home é un mito da súa vestimenta, unha mirada circunstancial no devir dos anxos.

2 comentarios:

  1. Impactante tres en uno.
    El Arregla-todo definitivo.
    Me descubro.

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  2. ¿Te descubres ante la utilidad o en la contrariedad? No importa, la supuesta poesía y el supuesto poema lo arreglan todo..., e incluso podemos usar pegamento de contacto para la inspiración de las formas.

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