La excesiva aristocracia decae en algo que se llama servilismo.
Por eso he reivindicado siempre mi condición plebeya; siempre nos queda la Bastilla por asaltar.
Esperanza muerta
Diría que hasta el propio abolengo es servil con su casta...
Por eso he reivindicado siempre mi condición plebeya; siempre nos queda la Bastilla por asaltar.
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