La respuesta está en mi primer comentario....agradecer sí, conformarse, no...porque con ese conformismo poco se puede mejorar, más bien estancarse en la conocida comodidad amarga.
Cualquier agradecimiento es merecedor de lo más elevado... ¿De comodidad en comodidad hasta el conformismo de los logros, o de incomodidad a incomodidad hasta el conformismo de los inconvenientes? La única y fundamental diferencia cuando hablamos de objetivos y fracasos, si me lo permites, radica en el agradecimiento más que en el merecimiento.
No te preocupes, ni yo mismo me entiendo... Vamos a apelar a tu lado pragmático y racional, para decir que quedarnos en un mismo sitio observando las confluencias, sin aparente motivación, puede ser perjudicial (hay que tener una finalidad y un deseo). Digamos que el conformismo no es nada bueno, simplemente, a veces, no distinguimos las salidas y es difícil coger al toro por los cuernos... El minimalismo de mi sentencia tampoco tenía nada que ver con este precepto, era, básicamente, el de no cegarnos con un punto cardinal.
En realidad deseaba que las tachases para con tus patatas hacerme una buena tortilla. Pero, no, mejor dejalas. En reidad mis palabras no estaban conduciendo a un lugar desconocido, sino a un punto cardinal equivocado.
Bien, con la mierda esta de no soy un robot, no me dejó corregir y poner bien la palabra realidad y quitar lo de tortilla que lo puse antes de leer tu comentario....casualidad?
¡Qué va! A veces podemos decir lo mismo sin querer decir lo mismo. Tengo empacho de tortilla, así que disculpa mis fluctuaciones. Si no me di a entender cómo debía, la equivocación es mía.
Sí, desde hace unos días pasa, a mi también me pasa en otros blogs, no es siempre, sólo a ratos. Debe ser que blogger ha leido nuestros diálogos y ha pensado que estamos locos o somos unos robots.
Dar las gracias siempre es bueno.
ResponderEliminarConformarse con lo menos, pudiendo tener lo más, no sé si lo es tanto.
Aludes a algún tipo de mediocridad... Lo ilimitado de quererlo todo es, francamente, un camino hacia lo irremediable.
EliminarNo quererlo todo,no, querer lo mejor. Y bien, mediocremente quedemonos en el agradecimiento de lo peor.
Eliminar¿Si no agradecemos lo "peor", el agradecimiento de la "nada", cómo mejorar interiormente?
EliminarEl que agradece la "nada" merece "algo"?
EliminarLa respuesta está en mi primer comentario....agradecer sí, conformarse, no...porque con ese conformismo poco se puede mejorar, más bien estancarse en la conocida comodidad amarga.
Cualquier agradecimiento es merecedor de lo más elevado... ¿De comodidad en comodidad hasta el conformismo de los logros, o de incomodidad a incomodidad hasta el conformismo de los inconvenientes? La única y fundamental diferencia cuando hablamos de objetivos y fracasos, si me lo permites, radica en el agradecimiento más que en el merecimiento.
EliminarHoy creo que es uno de esos días en que no voy a ser capaz de entenderte, ni de hacerme entender...
EliminarNo te preocupes, ni yo mismo me entiendo... Vamos a apelar a tu lado pragmático y racional, para decir que quedarnos en un mismo sitio observando las confluencias, sin aparente motivación, puede ser perjudicial (hay que tener una finalidad y un deseo).
EliminarDigamos que el conformismo no es nada bueno, simplemente, a veces, no distinguimos las salidas y es difícil coger al toro por los cuernos... El minimalismo de mi sentencia tampoco tenía nada que ver con este precepto, era, básicamente, el de no cegarnos con un punto cardinal.
Ok, borra todos mis comentarios anteriores.
Eliminar¿Por qué motivo? Tú aportas claridad y yo juegos velados...
EliminarPorque si tú hablas de patatas y yo de zapatos queda bastante tonto, no?
Eliminar¿Deseas que tache las tonterías para reconocer los pies? ¿Si las palabras no nos conducen a un lugar conocido debemos dejar que hablen los silencios?
EliminarPuede que entre la simpleza esté reconocer el color de tus zapatos y la tortilla de mis patatas.
EliminarEn realidad deseaba que las tachases para con tus patatas hacerme una buena tortilla.
EliminarPero, no, mejor dejalas. En reidad mis palabras no estaban conduciendo a un lugar desconocido, sino a un punto cardinal equivocado.
Bien, con la mierda esta de no soy un robot, no me dejó corregir y poner bien la palabra realidad y quitar lo de tortilla que lo puse antes de leer tu comentario....casualidad?
Eliminar¡Qué va! A veces podemos decir lo mismo sin querer decir lo mismo. Tengo empacho de tortilla, así que disculpa mis fluctuaciones. Si no me di a entender cómo debía, la equivocación es mía.
Eliminar¿También aparece ese robot en el blog? Me pasa a menudo con el tuyo y con otros, voy a tratar de subsanarlo...
EliminarYa sabes, ad infinitum:
EliminarNo es equivocación tuya, sino mia, de algo tan fácil de entender, no lo hice....
Sí, desde hace unos días pasa, a mi también me pasa en otros blogs, no es siempre, sólo a ratos.
EliminarDebe ser que blogger ha leido nuestros diálogos y ha pensado que estamos locos o somos unos robots.
No me apetece ese "conformismo" cuando el pecado es de otro...
Eliminar¡El oráculo de blogger nunca se equivoca!
A mi tampoco me gusta, sabiendo que el pecado fue mio.
EliminarConclusión: ¡estamos locos!
;)
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