ESCRITOS


24/8/16

Hay ciertas obras insulsas cuyos prologuistas las elevan a inusuales (me temo que detrás de ciertos preámbulos aguarda el purgatorio). Entonces, el peor epílogo se convierte en un bosquejo de incitación. Hay que tomarse con humor aquellos libros vulgares cuyo genio es ensalzado a la categoría de arte.

2 comentarios:

  1. Nunca entendí la poesía, tampoco entendí por qué había que interpretarla, una vez que yo la leo, lo que sirve es lo que yo siento. Ya me perdí, ¿De qué hablabas?

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    1. Es más complicado entender a los poetas y cierta idiosincracia de la que no estamos libres cuando se trata de agrandar egos y banalizar. Sirve lo que sientes y eso es suficiente, pero no sirve todo lo que escribimos...

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