Entre el optimismo ciego y el pesimismo ciego, me quedo con el primero, se que suele joder bastante a los demás, pero el segundo me jode mucho a mi y ya no estoy para jodiendas.
Pues a mí me parece que el optimismo ciego está cerca de la locura, y aunque me agrada ese manicomio generalmente, lo relaciono con gente extrovertida hasta la demencia. Optimismo ciego y realismo son dos contrarios, tal vez un café pesimista con edulcorante para el amargor. Con todo esto no quiero decir que no estés en lo cierto (me encantan las mujeres optimistas con una pequeña dosis de tristeza).
Cierto,son dos contrarios que se complementan, el realista pone los pies en el suelo al optimista ciego y éste a su vez le proporciona al realista ese punto de locura que le permite soñar (pero como he dicho antes, esto para mi) Y quizá el optimista ciego sepa más de tristeza de lo que se cree y ve.
Tarde o temprano cierta melancolía nos pone en el sendero de las fluctuaciones, sin llegar a apagar del todo esa luz... La tristeza de un optimista debe ser como un ocaso dulce y ensangrentado, me gustaría estar presente para contemplar esa maravilla.
Entre el optimismo ciego y el pesimismo ciego, me quedo con el primero, se que suele joder bastante a los demás, pero el segundo me jode mucho a mi y ya no estoy para jodiendas.
ResponderEliminarLo mismo digo; pero, evidentemente, un optimista ciego cerca de un pesimista redomado (dos optimismos ciegos son demasiada ceguera).
EliminarSigo prefieriendo la ceguera en demasia...aunque combinación buena para mi sería; optimismo ciego/ realismo
EliminarPues a mí me parece que el optimismo ciego está cerca de la locura, y aunque me agrada ese manicomio generalmente, lo relaciono con gente extrovertida hasta la demencia.
EliminarOptimismo ciego y realismo son dos contrarios, tal vez un café pesimista con edulcorante para el amargor.
Con todo esto no quiero decir que no estés en lo cierto (me encantan las mujeres optimistas con una pequeña dosis de tristeza).
Cierto,son dos contrarios que se complementan, el realista pone los pies en el suelo al optimista ciego y éste a su vez le proporciona al realista ese punto de locura que le permite soñar (pero como he dicho antes, esto para mi)
EliminarY quizá el optimista ciego sepa más de tristeza de lo que se cree y ve.
Tarde o temprano cierta melancolía nos pone en el sendero de las fluctuaciones, sin llegar a apagar del todo esa luz... La tristeza de un optimista debe ser como un ocaso dulce y ensangrentado, me gustaría estar presente para contemplar esa maravilla.
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