¿Acaso te dije qué hacer, engaña al placer y a la carne o deja que el amor se desangre como un cochinillo?
No importaban los días ni el sacramento, la vaguedad en el ojo y la dicha enhebrada.
Te ofrendé caricias y un lugar sin repulsión, pero el barquero no quiso guiarnos a un paraíso cierto.
Chilla
el amor con su herida abierta y las aves alzan el vuelo como un motín
de marineros ciegos. Mañana estaremos muertos y de qué habrá servido la
renuncia, bailar con todas las orlas del cielo, si no apresuramos el
paso hacia ningún lugar.
Seica dixen que facer, engana ao pracer e á carne ou deixa que o amor se desangre como un leitón?
Non importaban os días nin o sacramento, a vaguidade no ollo e a dita entrefebrada.
Ofrendei caricias e un lugar sen repulsión, pero o barqueiro non nos quixo guiar a un paraíso certo.
Berra
o amor coa súa ferida aberta e as aves emprenden o voo como un motín de
mariñeiros cegos. Mañá estaremos mortos e de que nos terá servido a
renuncia, bailar con todas as orlas do ceo, se non apresuramos o paso
cara a ningures.
No hay comentarios:
Publicar un comentario