Nada de engaños para este encargo, le dije a mi criado, se el mensajero, el heraldo de mis vicios, Hermes e Iris en un solo gesto. Esta es la dirección de la iniciada. Todo debe estar preparado para la prosternación de lo sensible. Nos acompañarás a los aposentos donde aprehenderé la interioridad desnuda de mi deseada en la más completa ocultación de nuestros rostros. Ambos, con una seda negra alrededor de los ojos; ambos, aprendiendo la nomenclatura del tacto y descendiendo a los aromas carnales de la noche. Esta vez nuestros labios permanecerán sellados, amordazados... He comprado unos tapones amarillos para los agujeros de los oídos. Si muere un sentido, los otros se alimentan de sus despojos... A esta forma de amar la llamaremos "tres monos", por lo de ciegos, mudos y sordos.
¡Amor San Saru!
ResponderEliminarY con el tacto aprenderse y amarse.
Yo diría que es bueno hacer monadas, incluso a lo japonés...
EliminarEs muy bueno, nos pone en contacto con nuestros ascendientes más primitivos...
EliminarNo por ello menos sofisticados y sibaritas...
EliminarQuizá apostaría que más...
Eliminar:)
EliminarJeje (I)liada y (O)de(I)sea en un solo gesto!!!… sin visión nocturna, ni armas de largo alcance, un cuerpo a cuerpo invidente en manos/monos del servicio de inteligencia y la manipulación informativa ; )
ResponderEliminarMuy acertada descripción!!!
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