Al final sólo subsiste el tedio y la muerte; más allá, la poesía sólo sirve a los dioses.

Tu hijo está podrido de turrones navideños.

Cuando ya no eres nada ni vales nada estás más cerca de la bondad original y de la belleza cambia pañales.

Dime, ángel femenino, ser superior, ¿por qué no deseas a un animal con pelos en la nuca? ¿Es que la noche furcia no tiene un collar para sus perros?

Es cierto, se puede extrapolar, no mezcles el placer con el óbito.

Recuerda tender las bragas y que sea el amor su único asidero, la cálida brisa que las oree. ¿Se te han caído y las han olisqueado los sabuesos? Ninguna fosa nasal es más certera.

Tal vez deba dar un paso hacia un amor imposible pero no sé qué calzarme para la ocasión.

Es absurdo ser amado por palabras que no nos pertenecen y que de esa usurpación resulte nuestro ego.

Para una mujer católica soy demasiado anárquico. Para una mujer anarquista soy demasiado católico. La verdad es que me siento a gusto sin religión ni credo revolucionario.

A veces una chica nos observa como un ángel y no podemos por más que decir: ¡Qué diablos!

Señora, ¿cómo describirlo sin ofenderla? Es usted... ¡Oh diosa!

Hay que convivir con el poema hasta el estupro y el estupor.

La realidad es la inanición; encontrar un pecho y mamar de él,  la fortuna. ¡Querida, aguarda por mí con un sacaleches!

Ningún demonio desea ser domesticado por un cielo.

Cuando salen los poetas a tomar unas copas siempre paga el insolvente. El insolvente es la putilla de turno que nunca se beneficia de su clientela, tiene que soportar todas las mamadas y tragarse el ingente semen de literatura anticonceptiva.

-¿Así que un animal irreal con aspecto de liebre, patas y caparazón de tortuga, ha decidido pararse y correr al mismo tiempo, dar zancadas hacia adelante y hacia atrás, estirando el cuello sin ninguna finalidad con tal de imponerse la medalla del mérito?

-Veo que conoces bien a los poetas.

El amor nos deja indefensos contra el bien.

¿Perdonarías una infidelidad? Lo imperdonable sería una fidelidad categórica.

La casa del artista está llena de ganas de amar, cagar, eructar, orinar, prostituir..., y todos los esfínteres aguantando el oprobio. Risas ingenuas y la poesía descendiendo por el costado del mal. Publica el poeta sus pedos rosados mientras muerde unos labios incrédulos: boca de arcángel, cabello de querubín, alas de gorrión. La devastación de una noche deslizándose por la gatera y la luna ardiendo en la confluencia del mar. ¡Levántate, corazón soplamocos, y dulcifica de lágrimas un triste pañuelo! Tal vez te ame con la bellaquería que no tiene remedio, con la estupidez de un ser insensato y el hambre de un holgazán. Es hora de acercarse a unas cachas, aparearse sin sentido y sin finalidad; ensuciar de semen un magnífico tocado y deshacer como un dios alopécico el arduo acicalado de las musas. 

Todo llega y, en contrapartida, todo regresa.

Quien tiene cuerpo lo utiliza, quien tiene alma la utiliza, de nada sirve reprimir la belleza.

En un arca a salvo del tiempo, alguien o algo guarda el tesoro de la vida para que un simple animal femenino vuelva a empolvarse la nariz.

El hombre mierda, bollería industrial, es el nuevo aborigen australiano.

Me observaste con ojos de desprecio, me besaste con labios de cera. La dicha, la dicha nunca está en lo que se anhela.

El abanderado es el más estúpido de los románticos.

Todo el mundo querrá salir contigo, follar contigo, lo que quiera que se haga contigo... Tienes la totalidad de las estrellas a tu antojo y la posibilidad de cualquier universo, el motín de los soles alumbrándote.

Oh, alma boba y viciosa, te pondré un collar y te sacaré a mear. Allí podrás hacer tus necesidades, oler las esquinas, mover el rabo y ladrar.

Puedes poseer a quien te plazca: ¡complácete!

Es hermoso aguardar en las llegadas el amor que nunca llega. ¡Oh, arrival, arrival, siempre he deseado estar ahí!

Alguien debe elevar la sandez al grado de impunidad, para eso existe la clase política.

Dadme un ser cabal para apreciar lo insensato de un corazón.

No se puede desperdiciar ningún amor ni dejar los huesos para los perros.

Rajoy pretendía parar un trasatlántico con un tenedor cuando el mar era suyo. Ciertamente, todos los mandatarios son patanes a la hora de gobernar.

-¿Usted cree en la ocupación por la fuerza?
-No, sólo en la fortaleza de los desocupados.

-¿Le importa si fumo?
-Sí.
-¿Le importa si me esfumo?

Poeta, ya tienes tu inmensa soledad para lamer vaginas de calamar. 

Acostumbrado a acuñar me conformaría con ser el membrete de tus tetas, pero antes de rubricarlo haría de pisapapeles y matasellos. Si pudiera parar el tiempo me quedaría con un impreso de tus pezones en un recurso de amparo.

-Necesito que me folles...
-¿Aquí, en la oficina, delante de todos?
-¡No, tonto, delante de tu madre!

Ríete de los pechos afilados como guadañas y del cepillo de Puigdemont.

En aquella relación había demasiados porqués. La indiferencia de las razones ante la insuficiencia de las exclamaciones.

-Votarem! Votarem! Votarem!
-Disculpe. ¿Qué dicen éstos?
-¡Follaremos! ¡Follaremos! ¡Follaremos!
-¡Bravo por nuestros estudiantes!

Dame un poco de cielo azul y mierda de papagayo en la sopa.

No son negros los ojos del Amo... sí de fuego... Dorados. (Megan)

Esto no es una tonada rusa. Los ojos de la patata son los ojos del vodka. Me has engañado, amor, me has engañado porque naciste de la tierra y yo te confundí, borracho, con un ángel; y ahora estoy compungido como una cebolla. ¿Qué se le va a hacer, qué se le va a hacer, si ebrios soñamos en un patatal? Brindemos, brindemos ahora, monda y lironda, con un poco de suerte no desentonaremos con la canción. Las solanáceas son tibias como el atardecer y heladas como la noche. Te saché, te saché y te corté en dos. Te saché, te saché y se te comió el ratón. Tu puñetero corazón es una piedra y no sé cómo destilar alcohol de una roca. Alma de escupidera, te di algo para amar y me devolviste una traición. ¡Maldita, estoy tiznado y eso ya no lo remedia el hado! ¡Asesinemos la poesía con puñaladas traperas, miel y vinagre para las heridas y licor para las penas!

https://www.youtube.com/watch?v=XLBlns8wOBA

Yo estaba ocupado con tus gemidos (nos podría haber oído el viento en Camariñas). El sol templaba mis cachas bajo los pinos y a ti se te clavaron las acículas en el ombligo. Aparté los rastrojos para que pudieras copular en las toallas pero mis calcetines desmontaron la escena de la playa. El norte vociferó en la gruta boscosa su hermosa melodía atormentada: barreremos el polvo, vida mía, y el olvido barrerá nuestro recuerdo.

Estamos tan salidos como limusinas de feria que hasta la bruja de la escoba es una zorra con encantos. Bueno, padre, te llevo a casa, ya estás mejor, y a la enfermera también por el precio de dos (me enferma el estampado de sus bragas).

¿Por aquí puede ser filete con patatas? Preciosa, por aquí puede ser tu carne y mis tubérculos.

Con el desperdicio de tus ojos se podría alimentar a un ejército, con el desprecio de tu mirada librar una contienda.

He sido atracada por un aparcacoches. Eso es lo que piensa una mujer cuando se da cuenta de las intenciones de un galán.

Ama como si te lo hubieran hurtado todo. Vive como si no poseyeras nada.

Quítate la ropa lentamente, desconsiderada e indiferente, como si fuera gravoso acostarse conmigo, y duérmete antes que llegue la Galerna (no te preocupes, es sólo un ejercicio en la distancia, una asignatura a impartir). Descubrí un placer gandul y apático. Cuando te besé, tus dulces ojos cerraron los párpados. San Pedro no sabía que estábamos dentro, impasibles como muermos. De observar siempre el rostro de Dios nos desmotivamos y llegamos a caer en la más absoluta desidia. Sopor y cabellos de ángel eran nuestras almohadas. 

Aquella chica de ojos ambarinos, del color del trigo segado, metió el brazo entero en aquel caldo (espeso como un día sin alma), entonces me sentí como el culo de una vaca, dispuesto a levantar el rabo.

El deseo no pasa dos veces por el mismo cadáver.

Me habéis engañado. ¿Me has engañado? Hiciste bien, yo también creo perdidamente en el amor.

Tus besos son como un cáncer y en algún momento deseé ese mal.

Desperdicias el afecto si no te detienes en el ojo de la tormenta.

Tengo roto el corazón de amarte sin escuadra y cartabón.

¿Señora o señorita? Lo pregunto para conocer su grado de insatisfacción.

501 alarmas y ninguna funcionó a la hora de perderte.

El poema nunca se equivoca, él es nuestra presunción.

Cuando salías conmigo, eso pensaba, cualquier mujer enamorada estaría dispuesta a fregar los platos, pero tú preferías un lavavajillas a un solitario grifo sobre la cubertería. Ahora recuerdo que después de conocerme el amor te parecía una absurda jaula para simios.

No hagas de mi corazón una respetable casa de putas... Ningún cielo salvaje llueve en un orinal.

Pequeña, yo no creo en medias naranjas. Espero que hayas encontrado definitivamente el palo de la escoba, el mango de la fregona o el pomo de la puerta...

Subiendo por las escaleras de servicio hacia un centro comercial, el poeta lleva a su nieta en brazos.
Asciende de los sótanos un hedor a desperdicio. El poeta se jacta de la nauseabunda fragancia, y, la divina criatura asiente con total indiferencia: ¡es tu aliento que huele a basura!
Por supuesto, un ángel es incapaz de mentir.

Si respiramos el mismo aire y comemos las mismas lentejas, cagamos el mismo pellejo de legumbre así nos escupan las uvas de la ira a la cara.

El amor nos llena de cuervos y nos hace graznar sobre cadáveres.

Ahora estoy ocupado con material de publicación. Tengo que escoger la foto de un ano para el encabezamiento de un libro de poemas: Se busca esfínter con don de gentes y total disponibilidad para servicios editoriales.

Nana para un niño con suerte...

Hay que hacer de este mundo una casa de citas, para que cuando duerman los infantes se solacen los padres.

Me recuesto sobre el asco y sólo tú puedes sacar lo mejor de mi, la animadversión debajo de las alfombras. Soy simple como un memento que escribe códigos en su piel y apresura el tránsito hacia ningún lugar.

Nadie estará allí para nosotros, ni siquiera una madre protectora para reconfortarnos con sus pechos. O sí, puede que sí... Claridad de la muerte, tu leche rebosa en mis labios como un seno de lactancia.

A lo lejos, en el interior de un regazo, la redondeada esperanza, el latido apremiante a través de la acuosa placenta. Llega, y nada puede consolarnos de la terrible decepción de nacer.

Si te doy demasiado afecto huirás de mis caricias. ¿Si te doy desconsideración regresarás a mi tacto?

Tu advenimiento está escrito en alguna clase de liturgia. Tal vez pueda equivocarme como un poeta iluso que juega a la suerte de los necios con sus dados, es probable.

Te debo una disculpa para volver a profanar tu cuerpo... Mientras la puerta permanezca cerrada regresarás a mis llaves. ¡Ay de la puerta cuando se abra, te perderé para siempre por una oquedad!

Como en tantas cosas, también en esto, soy demasiado estúpido y egoísta, necesito que me llames y digas mi nombre para saber que dices mi nombre.

No quiero una maruja, prefiero un marrajo y mandarlo todo al carajo por Poseidón y las Musas.

Nunca he solicitado una niñera porno. Quería pagarte porque olieras mi ambigüedad y me limpiaras el retrete. En medio del desastre, maldecir como blasfemos y gozar como perros. 

Con un inmenso asco de tu parte y la indiferencia de los astros por amarte, deseaba tu desaprobación incondicional y tu más absoluto desprecio.

Dios es ateo, por eso estoy considerando ser creyente.

A veces se rompe el cielo como un fractal porque todo es una especie de algoritmo y el amor un jodido estreñimiento.

El tormentoso camino a la indiferencia es lo mismo que un poema no correspondido, inacabado o inadecuado.

No importa quién es el dueño del burdel, San Pedro es un okupa.

Las niñas buenas no van al cielo y el barquero prefiere cobrarle a las feas.

Una fabada a medianoche hace que te adentres directamente en el mundo de la mediunidad.

Antes que el amor a primera vista, el flechazo, prefiero la zancadilla y el tropiezo.

¿Para qué desvestir Ángeles si no podemos acostarnos con ellos?

Come, bebe, ama... y serás tan rico como cualquier pendenciero poeta.

La plétora de un artista no consiste en dejar a nadie atrás sino en ser abandonado por todos.

Te has apresurado a asesinar todas las estrellas para ponerte a salvo de la luz.

Somos la ola que se duerme en la tasca añorando las pulgas, el amontillado y la belleza; la borrachera infinita se enroca en nosotros como una cochinilla de mar.

La edad del corazón es la edad del engaño, cuando la mentira sabe a plenitud.

Hay los que ni siquiera ante el umbral de la certeza pondrán su fe en lo posible.

A veces uno se cree el culo perfumado de Adonis.

Para un poeta únicamente es aceptable la ciénaga o la eternidad pasando por la letrina.

Solo te diré, ama; solo te diré, precozmente.

El mundo no se acaba en una mujer, empieza en otra.

Cualquier animal enjaulado se muere por los besos de un idiota, y el necio no comprende que el amor es una cizalla.

Para los que amamos la inocencia, la mayor perversión sólo puede ser inocente.

¿De qué sirve un coño depilado como la isla de Rapanui sin un Moái entre las piernas?

Cada día me parezco más a un bastardo pisoteado por un yack, coceado por cabestros y mordido por serpientes. La divina inspiración suele detenerse en el despojo de los buitres y en la risa de las hienas.

Gedeón y sus 300

De entre su pueblo,  Dios escogió para la batalla a los más precavidos. Hubo algunos que se sumergieron en aquellas aguas hasta las cejas, llegaron a remover el fango con las pestañas y a besar el ano de las ninfas. En sus espaldas ponía: ámame, ódiame, mátame, soy un poeta judío.

Haz el amor y siempre la guerra.

Hay tanto que sentir que todo lo posible arde de promiscuidad... Te has puesto un vestido vaporoso como un espléndido día de verano. Te favorece, pero no has prestado atención a su aspecto. Salvaje y libre de cualquier atadura me convence tu escritura y el desgarbado recelo de tu alma. Yo soy el imprudente que te compone el talle para marcar los límites, aunque sea innecesario delimitar la belleza. Oh belleza, te amé desnuda cuando no existía nada que objetar ni nada que planchar.

Escribes como una marea incesante acariciando la orilla. No tiene sentido detener el mar para cambiar el curso de las olas. Escribes las fluctuaciones de una mano en el agua o la gravedad de un guijarro que se sumerge para recrear el hundimiento.

Igual que una madre acicala los cabellos de un hijo, esa es ahora mi tarea: peinar los versos hasta desenredar los nudos.

Corazón de alcachofa,  te deshojé y hallé una alcachofa.

Una guerra femenina es un armisticio de sangre.

¡Puro y copa para un affaire desgraciado!

De camino a la ebriedad, la poesía es el vino y el poeta un sacacorchos.

Todo poema es plenamente consciente de su necesidad de bajarse las bragas.

El perfecto encanto femenino es un tweet en la arena.

Recrea el mar en su interior igual que una caracola vacía.

La belleza con un mondadientes es mi ideal de perfección.

Todas las horas han de sucederse, a veces con faldas cortas y medias largas, y hay viandantes que observan de reojo el presente de esos andares y el futuro de unas caderas. Sólo unos pocos, los más osados, se atreven a piropear las hechuras del tiempo.

Morir por una meta elevada. El ave tallada con el ala quebrada yace cerca de la ventana. La hermosa flor fue cercenada, su pose inquieta y delgada. Si lo dieses todo, excepto el alma, no habrás dado nada.

Nos crearon los ahogados. Huracanes asistieron al dolor y al parto de las olas. Gritaron su fatiga los ojos que ven unas guadañas por fulgor del sol contra el metal, aquella devastación innombrable y tremebunda.

Niñas de cuatro años en una piscina

(Una más competitiva que la otra)
¿Jugamos a llegar al otro lado y ganar?

Gané, gané,  gané...
(Entre la dulzura que sólo puede otorgar la inocencia):
¡Creo que eres una perdedora!

Los pobres no se dedican a pagar vientres de alquiler: los joden y se joden con ellos. 

Antes que mi pájaro aterrice en tu cielo quiero amarte avec plaisir. Más tarde, mi crueldad, como un coucou malade, vaciará nuestro nido de polluelos.

Después de un concúbito, lo más terrible es quedar como el defensor de Lannister el enano, aplastado por un coño polivalente.

Es usted demasiado temperamental para ser ornamental y huele deliciosamente a cabra, ¿no será hermana de Heidi por casualidad? Sepa que yo también adoro las montañas, a los viejos y a los imposibilitados (es un engaño); las pajas, el heno; las fuentes, las aves, los riachuelos, los altos cipreses (más que los rascacielos); perros de nieve con cerveza o licor y puritanas niñeras cerca de los acantilados (¿dónde mejor que en el seno de una mosca cursi y zumbadora?); Alemania bajo el bombardeo de los aliados y el ejército rojo violando a sus feminazis.

Cosas de Billy

-Y después de lo hermoso qué gratificaciones nos deparará el futuro.

-A mí en particular la más absoluta decepción y la hilarante sensación de tener el palo de una escoba metido por el culo.

-Pues nada..., a barrer el polvo del camino y a cuidarse de las aviesas intenciones de los barrenderos. No te preguntaré si tienes el recogedor a mano!!!

-La vida es wonderful!

-La vida es wonderbra!

Parezco un chocho peludo y sin lavar, si no fuera por eso sería un chichi.

Es más fácil quedarse a las puertas de una mujer que entrar en el paraíso.

Una cobaya le rompió las bragas al rompebragas, y desde aquella sólo hace el amor con animales oníricos.

Dicen que allende la des(composición) un poema repica campanas, clama ardores y apesta a yunque de fragua y fuelle de herrería. 

Generalmente, el cielo no se detiene en los tejados.

Con unos labios tan amargos como la fruta del vicio, corazón de compota, tengo un descorazonador para el alma.

Amar la literatura es como ocultarse bajo la piel de un roedor.

Soy un tipo sin nada en el pecho. Ya no caben en él, lápices de colores ni cuadernos musicales. Lo más parecido a caber es Ĉabar (una pequeña ciudad de Croacia).

Érase un hombre atrapado en un cuerpo de medusa y una Eretmochelys imbricata que se alimentaba de esponjas...

La vara sucumbe a la templanza.

Pongo serios reparos a la conveniencia de un peinado rockabilly en la toma de Okinawa.

Los sueños de los hombres eligen antros de jazz para morir.

La persona equivocada, en el lugar equivocado, me dijo que el amor no era un error.

Somos un canto lejano en la noche de los paparazzi.

Un cojón empedernido desea una situación embarazosa.

Es tan difícil pensar bien de alguien que no puedo perder el tiempo pensando mal.

El avestruz no querrá hacerlo con el babuino sin ocultar la bajeza.

Si tienes alas puedes volar,  si tienes alma puedes amar.

Para llegar a comprender tus versos se necesita un desencriptador de nebulosas y un abrelatas... La recompensa es un cielo despejado y una lata vacía.

¿No es lo mismo escote que estocada, senos que espada?

¿Qué,  cuando te dan una patada en el mismo corazón de la zarzuela, tú, que amas a todas las mujerzuelas?

¿Sabiendo que todo es una charca,  una trampa,  con qué quedarnos, con el veneno de la anémona o el corazón del pez payaso?

¿Quién ha escrito en el árbol la sed de la raíz? ¿Quién ha grabado en su corteza la necesidad de un amor?

La ostra está cerrada para el grillo carnicero.

Cualquier hombre que se precie lleva la redención escrita en la frente.

Ningún amor corre por las venas de un chacal hacia la noche y tú ya has aprendido a dejarte morir.

Día tras día, la belleza es traicionada por lo bello.

El destino es lo posible, pero lo posible nunca ha sido tan inverosímil.

A nadie le importa el arte (me atrevería a afirmar que ni siquiera a los propios ególatras), a no ser por la presunción de creernos algo más que unos simples estafadores.

Mujeres, vicio..., y un hermoso cielo para delinquir.

Estoy de acuerdo con cualquier religión que no nos impida ser incorrectos e inmorales. 

El peor de los salvajes es un hombre civilizado.

¿Por qué disimular al Neanderthal con colonia?

Un encuentro nacional de  poetas debe ser algo parecido a una asamblea cristiana de Testigos de Jehová. Los mejores elementos están en la cantina, bebiendo y solazándose con el servicio. Las mejores poetisas son aquellas camareras que soportan con picardía las chanzas de los borrachos.

La cristiandad también iluminó la noche con antorchas humanas.

No deseamos literatura de beneficio, deseamos literatura de maleficio.

Todos los poetas somos los pececillos de Tiberio, arrojados al Tártaro de Capri.

Safo se precipitó al vacío. Safo cayó en el amor más gravoso del mundo.

Huelo entre mis dedos tu merced.

Los verdaderos amantes no se ocultan a la inconveniencia de las miradas.

Pisadme con vuestras suelas, golpeadme con la punta del tacón, atadme al miserable cordón de una bota; y si amáis la delicadeza, pateadme con la arrugada misericordia de una sandalia.

Si ha entrado algún literato en el baño ha dejado una peste perra con su firma.

Hollypenis

¿No es el poeta un santo pene, una gloriosa insatisfacción y el peor de los gangosos?

Algunos aedos son como esos locos terribles con ganas de reyerta y el afán presuntuoso de cabalgar un ganso.

Cuando el destino se desprende de la matriz, libera a los muertos de sus entrañas.

-¿Alguna remembranza del bardo que lo convierta en Humano?

-Parafraseando a un amigo: no sólo puta pero también puta.

Diálogos con Aitor

-Nadie verá la mañana del día siguiente al último.

-Confiemos en el amanecer espiritual del último día...

-Habrá un último día (¿caerá en jueves, tal vez en lunes...?, ¿de qué mes?, ¿de qué año?). Habrá un amanecer, una claridad, una mañana que nuestros ojos YA no verán. Habrá un no-despertar. Habrá un no-levantarte, un no-ducharte, un no-desayunar... Un no-vivir.

-Llegaremos tarde a alguna cita inexcusable y se llenarán los buzones de cartas vacías. El frío banquero no querrá pagarnos al portador. Alguna mujer agradecerá el cumplido de no soportar jamás nuestra presencia. Las jambas se arquearán por el peso de los dioses que aposentan el trasero en las boardillas. Se apagarán las frescas risas de los niños y ya no se carcajearán los vecinos de nuestro semblante. Los cogollos tiernos serán para aquellos que se atrevan a aderezar el alma con vinagres.
En mi media vida, bacín de mendicante debajo de la alcoba, no se escuchará de nuevo el canto de las ranas. Si estar muerto es no despertar, yo siempre he sufrido de narcolepsia. Si estar muerto es no levantarse, a mí siempre se me han pegado las sábanas. Si estar muerto es no ducharse, aquí tenéis la confirmación de la mugre. No desayunar, no follar, está al alcance de cualquier mediocre existencia... ¿Cómo será regresar en otros ojos al fuego estival de las auroras?

Para Xavier

No quiero mil parabienes, ni cielos magníficos, ni bragas de oro que se humedezcan con zafias palabras, deseo lo detestable, el despropósito que contiene y da forma al barro -balsa de Aznalcóllar con la que aprenderemos a ensuciar paraísos-.

¿Qué decir de ti ahora, cómo nombrarte, si barres lo impuro que se acerca a besarte, el único pensamiento que pretendía sanarte, la única crítica en un mar de congratulaciones, aquélla que debías salvaguardar de tu censura? ¿Dime, compañero poeta, con qué voz se debe pronunciar lo inadecuado si al hablar nos cercenan la lengua?

¿Qué ocurre cuando pierdes la palabra de la rosa, la visión de la rosa y el aroma de la flor? ¿Dirías que no existe lo innombrable, lo que no se ve y no exhala, o es que tal vez has quedado sin alguno de tus sentidos? Sin embargo hay un sonido que nos devuelve los pétalos y una espina clavada en la piel del tacto... Incluso en el más oscuro vacío, en la más completa soledad, el espíritu inabarcable está presente.

Diálogos con Aitor

-Cuerpos exánimes: De lo inerte vinisteis y allá volvéis.

-Pero en el camino fuisteis testigos unánimes de la belleza.

-En medio del breve parpadeo entrevimos la tormenta y el éxtasis. No sólo eso pero también eso.

Ámame con la ternura de un amor viciado.

La poesía no es mercado, no libre mercado, sólo contrabando de ladrones.

Para algunos follar es una forma de acritud socialdemócrata.

¡Amor, el ocaso en tus ojos es un incendio de coptos degollados!

¿Cómo es posible involucionar hacia la muerte y no evolucionar hacia lo eterno cuando aquello que nos hace más fuertes es un asalta-tumbas?

La trastienda de la otra vida sólo puede ser una feria de ganado, asequible a la casa de la doma.

Desde el primer calostro, la primera literatura de leche,  hay un poema, una nana y unos cálidos pechos que nos amamantan, de la poesía del vientre de una madre hacia el soslayo de las matronas.  

Siempre he sido más muñequera que reloj.

La poesía no debe pedir permiso para infringir todas las leyes.

Explica Malamierda: por eso debéis pagar una revista literaria, porque no es lo mismo un producto que mil subproductos, porque obviáis el sacrificio del literato (peor remunerado que un político) y pretendéis escribir versos, párrafos, libros, relatos, para fomentar el canibalismo, la competitividad, el elitismo y la falsa modestia (nunca seréis especie si no formáis parte de un género especializado), porque os degeneráis de una forma auto-lícita, auto-inmune y difusa, publicando en la red vuestra tísica literatura (si es que ese compendio se puede calificar de arte). Se hace imposible sostenella y no enmendalla, puesto que se necesita una mano para llevar la polla al meadero y obrar la micción.

Me parece, Malamierda, que ese mundo ya estaba inventado antes de la segunda guerra, y que eres parte asumible y negociable de lo que tú mismo rechazas. Ya sé que hace falta una guillotina para tanto poeta, pero también sobran proclamadores de la fe que nos quieran vender el remanso de las letras como un catecismo. Es justo que rueden cabezas y es justo amar a los descabezados. ¡Dadme una mala hierba entre un montón de césped! No sé quién tiene que separar el grano de la paja (yo, que me hago más pajas que un exorcista, soy un completo iletrado en esa materia). Todos somos trileros en un mundo de rateros. Por favor, no nos vendas la moto, otra publicación del círculo de lectores; tú, que amas los libros al pábulo de las editoriales.

Las rameras y el estado nunca dejan de golfear.

¿Por qué no me muerdes las tetas y mantienes tu boca ocupada? ¿Por qué no me ases las cachas y te entretienes con mis protuberancias? ¿Por qué no me la metes y, por fin, tu alma tuerta podrá aporrear la puerta equivocada?

Eres un nadador compulsivo en una bañera de sales aromáticas.

Una mancha en un mar no contradice al océano.

Él se quedó con la flor pero alguien deshojó a Margarita, desconcertantemente ese era el mayor deseo del jardinero.

Traicionarse y adulterarse debe ser la máxima, antes y después del placer.

Lo que procede del sentimiento no hay que pervertirlo con razones.

Si te empastan las muelas y después tienes que jugar al rompecabezas de la caries, o a enseñar a una niña a juntar poesía con barbitúricos, y más tarde tu quijada sólo sirve para pastar rastrojos de un poema que mean las muñecas de porcelana, pon tu diente mi amor donde no lo encuentre el ratón.

Nadie pasa por la luz sin detenerse en las sombras.

-¿Qué le disgusta de su amante?
-Los dientes de sable.
-¿No es un buen sableador?
-Los dientes de Sartre...
-¿El existencialismo? ¿No es un buen salteador?

En un poema impecable la mentira divina abraza a todos sus muertos.

Soy un tipo a mitad de camino entre un huevo cocido y una beluga.

El alma desnuda carece de pudor.

Hacerlo con una buena persona es igual que un suplemento alimenticio. Tirarse a una mala persona es abandonar la dieta definitivamente.

Es totalmente desalentador poner la sed en el agua que se conjura en nuestra contra.

¿De qué están hechos los intocables hilos con que nos mueven? (Aitor Suárez)

De poesía...

Por las pulsiones, los miedos y las glándulas somos llevados. (Aitor Suárez)

Hacia el paraíso de las vísceras...

Pensamientos cuánticos

¿Los dedos estaban muertos o vivos antes de sobrepasar el hálito?

Con pecar uno solo de tus cabellos me conformaría.

Me siento como un dinosaurio canalla, un auténtico fósil en manos de una paleontóloga sexy.

Se puede sobrevivir a un apocalipsis zombie, pero no a una sicalipsis sin muertos vivientes.

¡Qué poco musculado está el poeta, con esa barriga cervecera y unas piernas que apenas sostienen su endeblez! Así la penitencia se aproxima como sombra para hacer sarcasmo del enjuto.

Hazme mal y recoge todo el bien que siembres.

Trabajo con un tipo que siente auténtica devoción por la conservación de los huevos de ave y los nidos de paloma,  y esto me agrada infinitamente,  yo,  que le besaría el trasero a un banco de  peces.

Háblame del corazón del ángel, no de la maldad del ángel... No quiero acostarme con uno y pensar mal del cielo.

Tal vez lo único destacable de este siglo,  sea una tremenda erudición de poetas empanadilla. Igual que una proliferación de urticantes medusas en una playa mediterránea, se podría decir que es más fácil tropezar con un poema que pisar una mierda.

Debe ser el hombre con su negra calavera quien conduzca a la mujer al negro altar.

Uno siempre acaba con la hembra equivocada, maldiciendo su equivocación.

La mujer 600 (belleza aplicada a la conducción) no es buena para llevar una caravana.

Me comporto como un déspota lamiendo tu conejo, comiéndome todos los gazapos de nuestra infrahistoria.

Mi patética poesía desea implosionar en tu corazón como una estrella difunta.

Congeniamos bien,  nos llevamos bien,  pero nunca quedarás conmigo para leernos la cartilla de racionamiento.

Mientras la civilización cambia la faz de la tierra,  el salvajismo debe cambiar la faz de las letras.

Solo deseo una vivienda con una puerta inmensa para tu trasero, unas ventanas enormes para tus pezones y una ingente claraboya para tus ojazos (no puedo imaginar mejor habitáculo para mi absorta poesía).

Manda el trabajo al carajo y piensa lo que harás en el tiempo de martillear un clavo.

Derivadas de un pensamiento de Nietzsche

Quien tiene un porqué para vivir puede soportar cualquier cómo.
Quien tiene un querer para existir puede aguantar a cualquier Quasimodo.
Si una mona está dispuesta puede acostarse con un mono.
No hay ninguna contingencia que no resista un coño.

Ámame, corazón bobo,  subnormal y tarado..., ¿no soy yo la costra del moco y el moco del pavo?

Menos mal que el mundo remiso de las consideraciones carece de autoridad ante las tablas de la inundación.

Da mucho asco compartir la casa con un poeta, un heterónimo, un anónimo o un seudónimo.

Siempre que amamos tropezamos con la realidad de una parodia. 

Si yo soy la yegua y el jinete, el semental y la amazona, quién monta sobre mis lomos.

Hay una clase de mujer que contiene un kit y ninguna manera de entender las instrucciones.

Pensé que eras tan bella como una tumba y que podía yacer en tu necrópolis.

No hay nada peor que meter el nabo en el culo de la mujer herbicida.

Me voy a hartar con el colesterol de tus venas hasta que reviente de caviar.

No dejes pasar una rosa negra y escotada por tu indiferencia.

Es doloroso observar un loco cielo atado a una cama de hospital, cuando la libre demencia vuela con alas de infinito.

Tenemos poco tiempo para alcanzar las olas de un mar que no es nuestro.

Caliente orín de perros sobre perros, España es un país de rastreros.

¿Qué le importa a nadie la sensualidad de una mofeta?

-¿Cuántos bolsos colecciona?
-Todos los bo(l)sones de Higgs que puedo.

La verdadera historia de Romeo y Julieta

Julieta ha muerto... ¡Muérete Romeo! Ella te está esperando desde la fría oscuridad de un sepulcro.

Julieta revive... ¡Muérete Julieta! El frío cadáver de Romeo te invoca desde la eternidad.

Julieta se apuñala, pero desconcertantemente Romeo vuelve a la vida para asistirla en sus últimos instantes (al fin y al cabo ningún veneno es más poderoso que la pasión).
¿Qué maldición es esa que ni siquiera los amantes consiguen encontrarse en su óbito? Romeo: ¿cómo morir ahora cuando se ha muerto de amor tantas veces?

¿Podría ser tan dulce como James Blunt con los dientes podridos, la mirada extraviada y el ano roto de sangrar esquinas? No lo creo, soy un completo majadero. No tengo una canción para el alma ni una equivocación que argüir en tu cama. Un "te amo" en mí sonaría como una carcajada vacía, más que como un "estoy perdido sin ti". No tengo presencia para cautivar a una musa patética, la única histeria que soy capaz de convocar es una hilaridad sin pestañas, la música de las letrinas en un antiguo burdel sin ventanas (en ese antro de las profecías nadie puede entrar sin desechar las letras). Barre mis ojos mientras puedas dejar algo de polvo en el camino y un poco de inconformismo para lamer las heridas.

Un huevo salió del calzón de un dios, de ahí proviene la gallina (recuérdalo cuando veas a todos los polluelos debajo de su ala).

Cuando dices amar a alguien,  no será que has estado ausente mucho tiempo.

Tal vez estés tan sólo como un poema en una cápsula del tiempo.

El esplendor de la lluvia acrecienta el moho eterno.

Estoy viejo y cansado y, sin embargo, me acostaría con aquella belleza morena de corrector dental. Cuando la observo con ojos de mal follador y mal pagador, y mal bebedor y mal perdedor (toda la maldad junta no puede ser banal), contemplo diamantes en su sonrisa y voluptuosidad en sus ojos (azabaches de una dulzura impecable), y su aparato es una grapadora sellando nuestras bocas.

120 kilos de fardo y tres containers,  me voy a poner excelso de la hostia, compartidos con otros compañeros poetas,  sudorosos, narcisistas y bellos como hembras pletóricas de pechos mojados y fajas lumbares, mientras hablamos,  por qué no,  bajo un calor pertinaz, de que ya no existe el amor eterno, pero sí tal vez la volubilidad de amar. El verdadero esfuerzo de aguantar los pesos muertos produce hernias discales y un tremendo desgarro emocional (es conveniente beber tras el esfuerzo e imaginar un masaje en la rabadilla). Hay magníficos sucedáneos, magníficos versificadores que ya no creen en el arte de la excelencia y preferirían refrescarse, simplemente, con un molinillo.

Dios creó el Cielo y la Tierra con yogurt de Macedonia.

Del Todo no hay un plano, un mapa a escala, una maqueta. (Aitor Suárez)

Pero tiene que ser divertido como un scalextric.

El total Todo en su totalidad nadie lo vio. (Aitor Suárez)

Nunca se baño en una playa nudista.

Tropezamos más con lo que brilla que con lo que se mitiga.

¿Qué romanticismo no lleva a los fieles de la mano al sacramento?

A mi zafia poesía le gusta tus canillas.

No quiero hacer poemas que les agraden a las hembras,  quiero hacer poemas que ladren los perros.

El culo de tu mujer me pertenece,  su corazón es completamente tuyo, para mí el amor es igual que un zurullo.

Diálogos con Aitor

-Nada será, cuando se haga la luz, tal como hoy es.

-Será como entrar en el cuarto de los niños y apreciar el instante...

-Vemos todo a través de velos, filtros y trucajes. Cuando los unos y los otros caigan, ¿qué contemplaremos?

-La desnuda evidencia...

Huye de cualquier definición y ocúltate en un perfume.

¿Renunciar al amor por amor no es lo mismo que negar a los amantes?

Empiezo a desconfiar de toda esa gente que lleva una nómina pegada al entrecejo, si no existe la mínima evidencia de desaprobación en su gesto.

Ven conmigo, apresúrate  a compartir el dulce semen de los momentos.

Después de mover,  digo yo,  60 toneladas de fardos con ayuda de las manos, ¿no merezco algún premio literario para compartir con otros compañeros poetas?

Helheim

Este es el auténtico Ghöll. Navegando por un mar de sombras hasta la puerta desconocida, hasta el río sin orillas, para completar el caudal del tiempo, el arca sin herrajes de nuestros recuerdos, la entrada custodiada por Garm... ¿Quién es ese fulano, ese hijo puta que se acuesta contigo? Definitivamente, tu hijo...

¿Cómo alentar un sueño hasta calentar un corazón? Feliz con mi insatisfacción no puedo perder más que la cartera, la compostura o la inspiración.

No sé qué hacer entre poetas, si cebarme o ensañarme, si afirmarme o negarme. Tal vez podríais invitarme a cenar (me acostaré con todos si recitáis una tropelía).

El sexo no es nada sin los argumentos para una adoración subrepticia.

¿Qué será rescatado en el juicio? Ni un pensamiento, ni una palabra, ni una mínima parte de lo que el alma elucubraba. Todos los recuerdos serán recopilados en la biblioteca del tiempo hasta que la pureza de unas manos limpie de polvo las solapas.

Tú eras hermoso, yo era hermosa, y ahora sólo somos unos feos encomiables...

Y yéndose de copas se metamorfosea.... (¡Quién fuera hipsípila que dejó la crisálida!)

Pero en serio, es probable que la capacidad de memoria de la mariposa no le permita recordar su pasado gusanil. De pronto se ve con alas, surcadora del aire con grácil vuelo... y no recuerda cuando se arrastraba por el suelo (¡anteayer mismo!).

Puede que también nosotros nos transfiguremos (metempsicosis, transmigración...) y no recordemos nuestras vidas pasadas, nuestras pretéritas existencias anteriores.

Amigo Mail: ¿Qué eras, quién eras tú hasta el martes pasado?

Aitor Suárez 

La seriedad de las rocas, la risa de los arroyos… la veleidad del viento, la constancia de los planetas… y los desiertos taciturnos, las selvas vociferantes... (Aitor Suárez)

Vida exacerbada en todos los dominios y una mirada al infinito ulterior... Las cosas son porque somos en las cosas.

A veces hace falta perderlo todo para saberse ganador.

¿Cómo follar un culo de cigüeña en una torre de iglesia si eres un ave incrédula? ¡Oh, pájaro solitario, baja a la charca de los sapos, a la alcantarilla de los batracios, y sumérgete en la locura!

Si no vives religiosamente estás más cerca de la verdad y si careces de credo más próximo a Dios.

Yacer con los gusanos después de alentar a las moscas.

¿Qué hay de los Virreinatos, la tristeza compartida de un Imperio?

En Port Elizabeth me oculté de polizón en un mercante. Tenía casa y familia en Botswana, pero todo aquello dejé (mi alma necesitaba otros horizontes). Aún espero en Madagascar un barco que me lleve y un amor en cada puerto.

La amé en uno de esos largos viajes hacia Sydney pero mi amor sólo duró hasta Melbourne. La recogí en la bahía de Flinders. Hacía calor y estaba en el arcén. Tenía unas buenas piernas y una mirada melancólica (es lo único que recuerdo de ella). Seguramente ahora estará haciendo el amor con un camionero cerca del Mar del Coral.

Otros mundos hierven en la quietud de los mundos.

Creer en el celibato es como pretender criar roña cuando puedes lavarte.

Copulábamos con los dioses y ahora es difícil cambiar de prostíbulo, de la misma manera que se nos hace complicado reconocer otra servidumbre.

No siempre hacer las cosas mal requiere menos esfuerzo.

Los cadáveres nunca sabrán que son cadáveres.

No sé si vale la pena ser hetero en un mundo tan etéreo.

-¿Mesa para dos?

-No, un banquete para enamorados de la promiscuidad.

¿No vale la fruta estropeada el don de la simiente aunque arraigue la podedumbre en su interior? 

El día que estés vivo, vivo de verdad, sabrás cuánto te desprecian.

Los moralistas tienen una imaginación tan desacerbada, tan desproporcionada, que son capaces de corromper el mismo vicio; así que en comparación a su idea del mal, el mismo bien es un ángel furibundo.

Pásate por mi casa y házmelo a conciencia... Quiero decir: sopla y sopla hasta que entren los lobos y se apaguen las velas.

Un ratón azul me susurra tu nombre en cada sueño. (Aitor Suárez)

Me yergo cagado y meado de azulete sin un control de plagas.

Para querer y necesitar hay que bajar la guardia y arrastrarse por la guarida.

Dicen que la muerte nos iguala, pero no por ello dejamos de admirar lo inimitable.

Hay quien para ahogarse necesita el mal trago de un querer.

Salus Per Aquam

Oh, spa, spa, prefiero la caricia de una prostituta a una pompa de jabón.

Cuando decimos que es necesaria una muerte para cambiar el mundo solo somos salteadores de ideales.

¿Vivir la ingenuidad o vivir de la ingenuidad?

Convencernos de algo es plantear un pretexto y reprochar una excusa.

Está claro que necesitamos una niñera porno y unos pañales mayestáticos.

Sentados en la terraza el confín se confunde con una balaustrada... Alguien diseño algo parecido a suplantar el horizonte.

-cayó muerto de ipso facto tan seco como un palo... (Billy)

-Directo al cielo de los patos sin pasar por taquilla... (María)

-Ya muerto, es una tontería no llevar al difunto de procesión en las tripas.

¿Por qué querer llegar a Marte cuando podemos yacer con Marta?

Una maravillosa historia de amor es lo mismo que meter un huevo en un microondas y esperar que salga un pollo.

Los poetas se reproducen por bulbos, por bultos, por esporas, pelos invertidos que crecen hacia adentro... Si tienes un quiste no juegues al despiste, no te operes, no uses Bactroban, el poema nace de un tumor. Cuando te estés pudriendo enraizará en tu caja mortuoria y de su interior saldrán un montón de polillas que intentarán profanar la cruz de hierro.

Carretillero loco, poeta loco, te estrellarás contra la luna cuando intentes alcanzar la rampa de los sueños...

Observa las formas del mundo, sobre todo las femeninas, ahí la realidad se hizo a consecuencia.

Solamente puede haber defecto en contraposición a la virtud, por lo tanto la perfección existe en  un grado inadmisible.

Somos una eyaculación de los Dioses, infinitos orgasmos de los demonios.

Si el poeta no consigue penetrar la belleza, bien haría la belleza en atrapar al pájaro en su jaula.

¿Quién (qué) escribió dentro del avispero? ¿Quién (qué) engendró en el insecto su organización eficiente?

La lujuria es una forma de acupuntura en el sacro.

Flirteando con un mozo metiste los dedos en mi copa y mi bebida se convirtió en tu jaculatoria.

Una mente despoblada es lo mismo que unas cejas espesas.

¿Qué hace que una mujer quiera ser pervertida de senectud?

De repente hay sueños mejores que almas a hurtadillas... Conozco ese cielo porque ya he estado en él y regresar nunca es una opción.

Cualquier mundo así, consumado en lo celeste, nos ciega con su existencia.

Ya entraste en el comedor del amor sin refinamientos y te llenaste la boca de manjares exquisitos y de polvo sacrosanto. No sé a qué salsa te refieres que acompaña al gimoteo de tobillo o al santo Toribio, ¿para carnes, para pescados o para legumbres?, aunque yo preferiría escanciar el orgasmo con un aguardiente de cerezas.

Se te ve tan cansada como el plato del Discóbolo cuando recoges los platos. Déjame echarle una mirada ateniense a tus omóplatos.

Tu semen arde todos los mares.

Sólo los pobres de solemnidad se pueden llamar amantes, aquellos que han sido miseria e imperio, Roma e improperio.

¿En qué carpintería del cielo no se da traslado al buen ebanista?

-Vamos a hacer limpieza para desprendernos de todo lo innecesario. Aquí, en este saco, meteremos a las perras.

-No. ¡Son bonitas!

-La belleza es superflua. Defecan y orinan por todas partes y no hacen más que estorbar.

-Pero... Pero... ¡Lamen!

Todos los poetas son como aquel Rey que se creía vestido y estaba desnudo. Todos los poetas, sin excepción, creen tener la llave del guardarropas pero no hay nada en el armario.

Con este calor lo que más apetece es un culo fresco, un par de tetas frías y una raja.

Diálogos con Aitor

-Si hay un Gran Plan, ¿qué pequeño papel desempeñamos? Nuestra función, nuestro rol en la Trama, ¿en qué consiste? …O acaso somos otro elemento más  del Decorado.

-Sobrevivir para cargarnos al Decorador. Él lo sabe, por eso tiene la intención de cambiarlo todo cada vez que queremos prescindir de su creación. Siempre fue la divinidad y hasta el más rastrero ansía esa elevación.

-Posiblemente seamos atrezzo y tramoya. Ni siquiera con derecho a aparecer en los títulos de crédito.

-Sangre de farándula para el entretenimiento... Agradece ahora tu existencia y nunca rehúses tu condición en el destino de la obra, honra el proscenio y aplaude la representación.

Como una sabandija, el poeta fue guiado por su amor hacia las estrellas (o, tal vez, echado de la casa por las escaleras). Varios sostenían sus piernas y el resto de su endeble cuerpo era llevado en volandas como un adefesio. Izado por el beso de un dulce corazón, elevose hacia el altar de los nombres y cayó como una losa en lo profundo de un pensamiento (las meditaciones de un poeta pesan más que un saco de estiércol). Aquella que no atendía al verso tembló como una rosa ajada por el reverso, simplemente se dejó persuadir por los fieltros del pedante. Al fin, el lóbrego y el borrego se unieron para engatusar al mundo y el alma no conoció otro descanso.

Vuela, pensamiento, hacia el corazón de lo amado y mantén tus sueños en un bostezo...

La delicadeza no necesita una vestimenta para sublimar.

Señora, hablemos del hambre. Usted lo sufre desde siempre, pues tiene los pechos caídos, es decir: padece de inanición y humedades.

Diálogos con Prozac

-¿Qué tal una estupidez de amor para variar? Los amantes deben reírse de si mismos...
-Me parece algo saludable.
-Pero el amor y el humor consiguen unos orgasmos ridículos.
-Vaya!!! Veo que no has disfrutado nunca de una buena comedia.
-Diviérteme!!!

Somos así, bestias entretenidas con lo probable.

Un peón en la partida también gana batallas.

El alma está dividida en dos partes proporcionales con un orificio para defecar.

Esa mirada, más que un juego de luces, es una auténtica pirotecnia.

Quiéreme, antes que el agujero del culo deje de ser interesante. Quiéreme con alevosía. Quiéreme, aunque ya no se lleve acabar los versos por delante.

Aguardo que lo libidinoso de un ser pueda excitar a un Dios.

Detrás de esas gafas seguro que hay una mosquita muerta muy peligrosa.

Balaclava

BALACLAVA

"quien pretenda moverse en las alturas literarias, deberá sumergirse en aguas profundamente oscuras… prescindiendo de agradarse incluso a sí mismo para acompañarse en exclusiva de los peces abisales... alejándose de la luz para encontrarla en lo profundo, ahí donde nace…"

María

Cuando lleven tu alma inglesa a cabalgar infiernos, recuerda que solo los aristócratas cagan yesca. Trotando por el valle de la muerte con temeridad e imprudencia, la soldadesca se convierte en metralla de cosacos. La estupidez de un imperio crea mitos y leyendas, pero más valiera relinchar y comer yerba, galopar y fornicar eslavas, que seguir las órdenes de un muerto llamado Valor. Solamente padecen los que han nacido para perecer. Si regresas a la batalla piensa en el agujero más negro que puedas (no el de tu general, hombre de Dios, el de tu ramera).

Si no mueres, si no estás muerto, no nacerás para la poesía.

Para morir de amor es necesario buscar la enfermedad e insistir en el duelo. La más placentera de las apariciones escanciará sus cabellos sobre nuestro rostro y relajará los labios para besar la desnuda mortificación.

Un poeta es un animal perdido entre un lavamanos y un bidé.

La soledad de Fanny es el verdadero poema.

Diálogos con Prozac

Cuando llega el cartero, el cetrero, el librero…, no hay imposible que valga. Te abre el sobre, te pega los sellos, ensucia con sus manos lo lacrado y se mete en tu cama para hacer ciertas las cartas que te manda un desconocido. Tú seguirás enamorada del amor pero tendrás que pagar las misivas con acuse de recibo mientras el correo del Zar galopa tus ovarios. 

Si la imposibilidad deviene después de una negativa, el poeta ya tiene su fango, su lodazal particular para recrearse en el desafecto; y si nunca lo confiesa, su pía de cochino para cebarse con piensos hormonados. En el caso que Él o Ella asientan afirmativamente, ¡oh perdición!, ¿dónde meterá su cabeza el ave falaz?

El espíritu libre regresa a la colmena para libar la miel de todos los espíritus.

Para el amor hay que profundizar bastante en las maldiciones.

Diálogos con Aitor y Prozac

-El Jefe Máximo ha colgado el cartel de “No molestar”.

-Se lo está haciendo con la secretaria.

-Según pasé por el pasillo número 3 del cielo, nube 7 estaba despejado y eché una visual y no, no estaba con su secretaria se lo estaba montando con Cupido.

Ni siquiera después de desprenderse la arena de un puño cerrado se puede asimilar el vacío.

Después de mil marcha-atrás (también es mala suerte) quedar preñada y parir a un poeta. Desde el principio, además de un hijo no deseado, una puta llorona a la que le  olían los pañales (muy holístico, hay que decir, para unas narices refinadas). Antes aprendiste a rimar que a mear, a marear que a navegar, a dar que a recibir, y el mundo te observó raro, como una cagada  de perro. Tu querida madre lo arrojó a los pechos de una nodriza estúpida y risueña antes de cortar el cordón umbilical con sus dientes. Ésta te alimentó con una leche más agria que el orín, y tú te enchufaste a su rosada aureola, a su dramático pezón, igual que una lamprea. Fuiste medrando con el desprecio de los sirvientes y la contrición de los servicios, siempre lejos de unos ascendentes que intentaban un coito sin interrupciones para concebir a un letrado.

¿Qué iluso mantiene el universo encendido por la llama y no por los ojos que lo contemplan?

El celo de una mujer barre el colchón de todos los polvos acumulados.

Lo que piensa y entiende el cerebro no guarda ninguna sintonía con el recto.

A los que creemos en la belleza nos parece adecuado meterle mano a las nubes.

Ayer se fue Nube, el único ser que se meaba de alegría al reconocerme. ¡Bienvenida al club de los perros muertos!  ¡Oh, mi animal, mi animal!

¡Un corazón que se pierda por mí! ¡Qué lata no, que no dé la lata!

Es evidente que no sé escrutar los pensamientos femeninos, no se me da bien... Dejar caer unas cuantas tejas no es lo mismo que tirarse los tejos.

Lo que amo de una es la frescura de un pintalabios. Lo que amo de la otra es su afabilidad para explicarme los ingredientes de una ensalada.

No me interesa para nada la naturaleza de las algas, aunque sean bellas bajo los reflejos de una tormenta, mi único placer consiste en atormentar tus nalgas.

Éramos recatados, un poco timoratos, necios y laxos, así que se entrometió Él y quedó con los dos.

Con un yoyó es suficiente para hacer poesía,  con un tutú es más arriesgado.

Todo es penetrable pero no todo es asumible.

Por todas partes huele a cadáver de poeta.

Los poetas,  jactándose de su tremenda lírica,  son como semidioses que se levantan empalmados y desconocen por qué  han sido abandonados.

La poesía del mundo no es más que una elucubración si se malgasta el tiempo de yacer con lo eterno.

Prefiero un Lama a un Papa, prefiero enlamarme a empaparme.

Tiene unas piernas tan largas que su coño es un reino entre las nubes...

¿Qué ave no intenta emprender el vuelo? Solo volando, como dice Benedetti, se puede hacer el amor.

¿De qué sirve un simposio de poetas si no vas a yacer con nadie? ¿De qué sirve una orgía si no vas a encontrar poesía?

No tener nada en el cerebro,  excepto una mosquitera para aves.

Ese trasero es un animal de rutinas,  feliz con sus inclinaciones y sus dilataciones.

Niña ingenua e inmoral, nunca pensé que arrasarías con mi alma.

Haz un repaso de todas tus amantes,  debe haber alguna que se parezca a Groucho Marx y te haya pedido una cita.

Cosas simples animan una simple voluntad.

Con el amor únicamente se puede transigir.

Ya has cruzado ese umbral,  sólo eres atractivo para las yubartas y aún piensas que tienes derecho al canto de las sirenas. No eres ponderado, siempre quieres más, y desprecias sus 36000 kilos de gracia.

Rorcual viejo con tinta de calamar en los ojos busca ballena adinerada.

¿No debería una novia, la noche de bodas, hacer lo que fielmente ha evitado todas las noches?

¿Qué tienen en común el vicio de una ola y una vagina tragaperras?

La inteligencia se abre de piernas ante la animalidad.

Qué prodigiosa, qué admirable chapuza… todo lo vivo. (Aitor Suárez)

Así podemos apreciar mejor la perfección del chapucero.

¡No sabes lo que haría con tu trasero, no tienes ni idea! Podría considerarse un altar, ese cajón de ánimas con sus dádivas y cirios, porque tú eres todas las catedrales del mundo.

¿Cómo dejar de sufrir el amor si hemos estado enamorados desde que las piedras padecen migrañas?

¿Crees que acabar en una habitación de hotel con nuestros instintos desordenados es la peor tropelía de estar vivos? Hasta el olor de la piel se vuelve frágil cuando no hay nadie a quien amar.

Mundo Desconocido

Después de acostarme con la más grata de las musas y perpetrar el más horrendo polvo desconocido, en vez de fumar un cigarro, lo que más me apetece es escuchar a José Luís Camacho hablándo de esoterismo.

Dibujé la estancia en la que hacíamos el amor, pero no había nadie para un amor así, ni un dormitorio tan amplio para nuestros sueños.

Las voces se apagan. Los corazones se deletrean. Quedarás sin palabras para nombrar la belleza.

Los extraños no pueden aplacar sus extraños sentimientos, se quedan ahí, permanecen apilados como huesos rotos en una estantería.

Hay que ir al grano

Nunca salgas con una dama sin contar sus verrugas, al menos intenta indagarlo con delicadeza. Por ejemplo: señora, quiero una lista detallada de sus furúnculos. Ella pensará que eres un ser metódico o un grosero y no podrá negarse a esto último; o imaginará suspicacias por lo bajo y exclamará improperios de contrabajo para sus adentros, sin comprender que tú solamente quieres ir a la fístula del enamoramiento, al cielo purulento de los abscesos. Oh, mi alma, cómo entenderás que amo la piel de anatema,  los lunares como soles y a la mujer con orzuelos.

Una hembra sólo puede ser yantada con la locura y voracidad de un senescal.

¿Y si Dios regresara con los muertos para ser un muerto?

Ángela

Ella tiene una belleza viva, una figura esbelta y estilizada. Insinúa algo con los ojos que yo entiendo por un axioma y sólo es una equivocación. Saca una barra de cacao del bolso y humedece unos labios que parecen Gobi, pero para mi representan la eternidad. Observé aquel maldito cielo femenino marcar las comisuras del amor. ¿Por qué una polla no puede hacer la misma función que un delineador? ¿Por qué una polla, como un lipstick, no sirve a la sequedad de un poema?

Acuéstate conmigo,  acurrúcate a mi lado, me apetece esa clase de indigencia.

En el trabajo,  en cualquier parte,  busco la confirmación de unos ojos. Me equivocaré el 99 por ciento de las veces y ese 1 por ciento no seré yo.

Más replicante que humano.

Tal vez salga con esa chica de ciencias... No voy a entender la insatisfacción y ella tampoco comprenderá la insinceridad.

¡Querida, regresa con el orgasmo a nuestro lecho y cierraré los ojos al grávido peso de la inmoralidad!

No hay ninguna perversión posible hasta que los pervertidos deciden amarse.

El deseo es inconsecuente hasta que pretendemos que sea real.

-Quiero hacer el amor contigo.
-¿Conmigo?
-No. Contigo.

Tú eres la bondad para algunos,  yo la degradación para otros. Si es posible quiero corresponderte y corromperte.

Otra vez he perdido todas las direcciones, si no fuera así le mandaría un hermoso vestido rojo con lencería amarilla,  bastante facha y poco republicano como sé que desprecia. Pero mirándose al espejo quizás asentiría: "me queda bien esta reliquia del Opus, me entran ganas de asesinar a tus monárquicos y fusilar falangistas. Por un momento has elegido el color de la sangre para todo lo placentero".

Poetílicos

-No lo he hecho (alabarte) pero me agrada especialmente tu escritura.

-Yo soy lo ajeno al poema, el simple y huidizo medio por el cuál la musa se manifiesta y hace visible los versos... por lo tanto si esa "no" alabanza va dirigida a las letras yo quedo sumamente agradecida con tu comentario:)

-Yo pienso lo mismo del verso y no puede haber dos personas que se desentiendan tan fácilmente de lo que son... Las letras son un medio para llegar al poema, el poema es un medio para llegar a tus medias (ahora tendrías que decir que las medias son lo ajeno a tus piernas).

 

-Non o fixen (encomiar-te) pero agrada-me especialmente a túa escritura.

Eu son o alleo ao poema, o simple e fuxidío medio polo cal a musa manifesta-se e fai visible os versos... por tanto se ese "non" encomio vai dirixido ás letras eu quedo sumamente agradecida co teu comentario:)

-Eu penso o mesmo do verso e non pode haber dúas persoas que se desentendan tan facilmente do que son... As letras son un medio para chegar ao poema, o poema é un medio para chegar ás túas medias (agora terías que dicir que as medias son o alleo ás túas pernas).

¿Será o no será? Mientras tanto puedo deshojar otras flores.

Descubrirán el engaño de tus ojos y no tendrás salvación en la casa de los hombres.

El ahorro está en el (des)precio.

-¡Te quiero!
-¿Insistes en la argucia?

La mente es un hervidero de serpientes y el amor se las come a todas.

Un simple saludo hizo que su trasero se contorneara 30 grados a babor de mis pensamientos. Un "te quiero" no sé qué habría hecho con la rosa de los vientos.

La poesía no puede ser insuficiencia para un espacio de solemnidad.

El verso no hace al carpintero aunque lo clave.

-¿Qué se dice del genio?
-Detrás de un geranio hay una gran mujer que cultiva plantas.

El entresuelo está lleno de Heinekens vacías.

El déyà vu de la vida ya no importa, a no ser que te empotres contra una potranca.

-Cariño, ¿desde cuándo el perro de presa me lame la entrepierna?
-¿Lo dices por mi madre?
-Por mi difunta suegra.
-¿Ya has puesto cianuro en los calzones?

El ganso de los huevos de oro me hizo prometer que nunca fertilizaría un embrión.

Escribes con alevosía y eso tiene su reflejo en el mercado. No hay nadie cuando estamos rodeados por la multitud. La escasez de Dioses hace que el creyente se detenga a pensar, si acaso la oración ha sido inadecuada o ha alterado los nombres de la supremacía. El ser no resulta de una ecuación perfecta. Mil perdones por no vomitar el desayuno, la ingesta de un ángel desnudo, porque la perra de los colchones se ha puesto a ladrar.

  

Escribes con aleivosía e iso ten o seu reflexo no mercado. Non hai ninguén cando estamos rodeados pola multitude. A escaseza de Deuses fai que o crente se deteña a matinar, se talvez a oración foi inadecuada ou alterou os nomes da supremacía. O ser non resulta dunha ecuación perfecta. Mil escusas por non vomitar o almorzo, a inxesta dun anxo espido, porque a cadela dos colchóns está a ladrar.

Soy un pez feliz en el corrector de su dentadura (ya no sonríe como antes por temor a que se vacíe la pecera).

Después de casarnos me hizo recoger todos los granos de arroz, contarlos, etiquetarlos y recobrar los perdidos. Ángel mío, te amo porque mantienes ocupado mi cerebro removiendo una cazuela de basmati.

Conozco centenares de célibes con una mente perversa y centenares de pervertidos con una mente limpia.

¿Es usted un probador de señoras en una gran superficie comercial? ¿Qué hace para mantener el perchero ordenado?

Malinterpretando a Marx

Todas las luchas apelan a las más altas intenciones para excusar su males.

Malinterpretando a Marx

Si el perro es el ser supremo para las pulgas, los hombres son parásitos de otro animal.

Tu cuerpo mejor que un alegato de poesía, el silencio mejor que un tratado de oratoria.

¿Qué hacer para que despierte de su sueño el mediocre desnudo que se cree vestido?

-Hai máis neuronas nunha cona que nun cerebro de clase media...

-entre a clase e a idade, media, refiro-me... quedo coa ausencia de estamentos no que á mente refire-se... a liberdade perenne e gloriosa como a que xorde en "os" comentarios... Quizais o futuro sexa a criónica das nosas aglomeradas palabras... -imaxinas?-

Por que non falar de aglomerar as almas? O mellor que lle pode acontecer a un poeta é desaparecer antes que crioxenicen o verbo. Imaxinas un verso tan aciago que non remate nunca, unha vida de retórica bohemia baixo un ceo de hidróxeno líquido?

-Eu o que non deixo de soñar é aquel día en que os libros non sexan meros "souvenirs" de andeis... e o mundo ou os mundos, estean a gozar cada vez que manifesten o cheiro dunhas páxinas en calquera fosa nasal.

-Ben..., eu aspiraría a que nas miñas fosas nasais se manifestase o arrecendo de algo vivo, o gozar do mundo ou os mundos, para que a poesía non fose unha mero souvenir de andel encerrado no soño dos libros.

-Hai máis neuronas nunha cona que nun cerebro de clase media...

-entre a clase e a idade, media, refiro-me... quedo coa ausencia de estamentos no que á mente refire-se... a liberdade perenne e gloriosa como a que xorde en "os" comentarios... Quizais o futuro sexa a criónica das nosas aglomeradas palabras... -imaxinas?-

Por que non falar de aglomerar as almas? O mellor que lle pode acontecer a un poeta é desaparecer antes que crioxenicen o verbo. Imaxinas un verso tan aciago que non remate nunca, unha vida de retórica bohemia baixo un ceo de hidróxeno líquido?

-Eu o que non deixo de soñar é aquel día en que os libros non sexan meros "souvenirs" de andeis... e o mundo ou os mundos, estean a gozar cada vez que manifesten o cheiro dunhas páxinas en calquera fosa nasal.

-Ben..., eu aspiraría a que nas miñas fosas nasais se manifestase o arrecendo de algo vivo, o gozar do mundo ou os mundos, para que a poesía non fose unha mero souvenir de andel encerrado no soño dos libros.

La belleza de estar contigo es menos grata que la belleza de estar sin ti. 

Ya has pasado por la cumbre y puede que la cumbre te haya follado tomándose una pastilla contra la psicosis.

Si quieres ser amado serás desposado por el más irracional de los engaños que se nutre de pequeños convencimientos.

Un chiste malo hace que el tiempo se detenga para hacernos reír.

Lo que no entiendo, a estas alturas, es que a la muerte de las editoriales aún se sigan fomentando los derechos de autor y no la gran promiscuidad del verbo y la negación de los nombres.

Si hace demasiado frío haríamos con nuestras palabras un pira para calentar los dedos. ¿Qué es un poema comparado con la hipotermia o los sabañones? ¿Qué es un poema bajo el rigor solitario de la helada? Lo que una vez ardió en el alma es insuficiente ante la azul palidez del raso.

Ha entrecerrado un párpado por el cansancio y él ha creído ver un designio.

En ningún momento, al hacer el amor, deseamos regresar del animal al hombre.

Hasta las lágrimas más puras ocultan una tristeza que no es real.

Ninguna voluntad vendrá a nuestro encuentro por propia voluntad.

El amor no crece en las ausencias ni vive al margen del poema...

¿De qué forma te voy a pedir que salgas conmigo? Dentro de un par de años tendrás que llevarme a orinar y cogérmela floja, o limpiarme el trasero hasta perder las uñas postizas. ¿Estoy senil de la muerte y encantado de conocerte?

En un adarme de cielo

La hermosa y soez erudición caga con las puertas abiertas en  una romana. Ellos no entienden de inspiración pero saben en qué nalgas meter la  polla dura de los amaneceres. Así que los verdaderos poetas, el verdadero ateneo de los poetas ebrios, está en los aseos de una fábrica,  en las letrinas de almacén o en los retretes de una taberna. No lo dudes, están tocados por el verbo y el verbo los ama. Éste, que menudea con las letras, no es más que un absurdo biógrafo de los tálamos, comparado con los verdaderos y divinos folladores.

La necesidad no es un cuento: necesito un hada madrina para mi varita mágica, y tú un Aladino que frote la lámpara.

¿Qué pensar de una mujer que no mira de reojo cuando sabe que es observada?

Somos la antítesis de nuestros pensamientos.

Ningún unicornio quiere morir en un establo.

Aunque nos decapiten,  seguro que hay para nosotros algún pendenciero hado que aguarda por las mieles de otra guillotina.

En el interior de un político se comete todos los días un magnicidio.

-Usted es una culta e interesante mujerzuela.
-Y usted un inteligente y hábil canalla.

Lo peor de los entierros es ver como el cura se aleja en BMW después de dar un responso y cobrar por el obituario.

¡Su lencería es mía, así que creo poseer algún tipo de sugestión sobre sus nalgas!

Penélope tejía y destejía el tiempo aguardando la llegada del esposo; pero, ¿acaso piensas que Ulises no hacía y deshacía bragas en su periplo?

-¡Mírame la saliva de la boca!
-Pero, ¿qué quieres?
-¡Las gafas para ver la tele!

Desafortunadamente, nos encontraremos en la poesía no es lo mismo que decir "ancha es mi cama", más bien que nunca nos faltarán los lectores.

Nos encontraremos en el amor no quiere decir "ancha es Castilla", sino que los lectores además comprarán nuestras obras.

¿Qué tal si no nos encontramos en ningún lugar conocido? Tiene que existir un ingente trasero de bibliotecaria que podamos leer de corrido sin aguardar nada de la literatura.

Las mariposas no se acercan a nadie sin que un enigma aletee en el aire.

A veces creo que la poesía es como un dildo sin culo o un anillo de pedida sin novia: autoconsolación,  autosatisfacción, autoayuda...

A estas alturas la verdad te pregunta por Silleda con la clara intención de follar,  y a la mentira no le apetece pasar por Google Maps para hacerlo. El poeta, en estos casos, es incapaz de dar con las reseñas aunque tenga un Tom Tom en el coche y una voz de señorita le diga: "desabróchese la bragueta. Coño encontrado. Enchufe la polla al satélite y diríjase a la casa de putas más cercana".

A estas alturas  el mar ya no oculta ninguna intención para los peces, y en cualquier bar de Silleda, por ejemplo, sólo nos aguardan los cazadores.

¿Qué sería de los feos sin la abstracción figurativa? 

Cuando el poema llama a sus corsarios hay que abrirse de piernas a la completa piratería; y ahí sí, quemar las naves.

Tú aún escribes poesía, yo sólo escribo perfidia.

Mantén el aseo limpio como los ángeles antes que Satán entre en el retrete.

Hay más de un cielo en la sangre y un estúpido corazón bipolar aguardando.

La buena lectura nos reconcilia con los fantasmas.

Crees que has llegado pero todavía no has emprendido tu camino. Crees que has emprendido tu camino pero nunca has salido de ti.

Tengo una quemazón en los riñones, payo; pa' mí que va a ser un católico nefrítico. (Hipogeo)

¡Vas a tener que mear cruces de bruces!

Todas las palabras son el envoltorio de un único pensamiento.

Pasea a su bebé lámpara en un carricoche. Se enciende cuando los extraños le dicen que es una preciosidad y que tiene los vivos ojos de una centella.

Mr. Darcy

Nor am I ashamed of
the feelings I related.

They were natural.

Did you expect me to rejoice in
the inferiority of your connections?


To congratulate myself
on the hope of relations
whose condition in
life is so below my own?

Adultera el amor con una zorra (si no fuera así empieza a desconfiar del gallinero). Paga por ser visible e inservible, con poderes de súper carroza, y cambia tu foto-váter de perfil por el perfil de una langosta.

El cristianismo no ceja en el engaño y el catolicismo en la perversión.

Sólo a través de los cuerpos la escritura conserva su humedad.

Volver a nacer significa pasar por el mismo lugar conocido.

Brillo de luciérnagas: la luz inasible quiere aparearse.

A veces el exultante amor se burla de los amantes.

La horda húmeda. La hora enumerada. El tiempo de unos ojos. La derrama de un deseo. La inmensa sonrisa del ofidio enroscado. El imperialismo de una lágrima... Vestigios de un amor en el alma de los esputos.

Era un buen poeta hasta que su degeneración lo convirtió en virtuoso.

(Dibujo de Mareva Mayo)

El cuervo a lomos del chacal junto a las filigranas de las flores serpiente... Mundos libres observándonos.

Volveremos a nacer con la muerte como partera.

Nuestro escaparate sigue con las mismas prendas desfasadas de siempre.

Vamos hacia el Valhalla con los brazos abiertos y una daga entre los dientes...

En el mismo paraíso deberían temer el presagio de los muertos.

Si el cielo no está escrito ninguna necesidad lo traerá hasta nosotros.

¿Qué aguardar de una hembra más que la razón de una muerte?

Que nadie trate de desparasitar al animal: yací con las musas y me erguí con la rabia.

La servidumbre viva de unas cachas necesita un amo que las reprenda.

El arte es largo y la vida corta como una navaja mellá. (Ginés)

Y, aun así, el arte necesita de la faca...

Conozco más personas que creen en Dior que en Dios. (Ginés)

La creencia más elegante tiene más adeptos...

No hay mejor pasión que vivir sin dogmas ni estigmas. (Ortega Palomares)

Igual que vivir sin sarpullidos.

Un bobo, en cualquier parte, nunca deja de ser un hombre serio cuando tropieza con su idiota.

La felicidad es un estado de pobreza asumible y deseable.

El mal es optimista, el bien es pesimista.

La nada es la más pertinente de las posesiones.

Si Dios habla francés el Diablo le responde en alemán.

Diálogos con Prozac

-A Kong no le gustan las rubias.

-Siempre le quedarán las morenas o las pelirrojas, hasta las calvas.

-Como en "Casablanca".

-¿Siempre quedará París?

-Para los bonobos.

Peste sobre peste, igual a fragancia.

Hace mucho que pasamos del sexismo, del sectarismo y las convenciones... De los penes para las mujeres a los penes para los peces, nuestra orientación sexual es una pecera.

En las profundidades de la mente hay seres abisales, krakens y demonios... Ni siquiera arañamos la superficie con nuestros pensamientos.

Si ha dejado sus alas de ángel en una peluquería, puede que ya esté en los infiernos.

Idílica felicidad, me he asomado a tu sonrisa y ahora añoro tus dientes podridos.

Nada sucede hasta que no es observado,  nada deviene hasta que no nos observan.

En el momento que se evoca la eternidad se pierde el labio del amor efímero.

¡Para siempre, con la mejor poesía, brindo a la salud de tu ángel obsesivo!

Entre mujeres, hombres y viceversa, ¿qué diablos es viceversa?

Pensar en ti es como desear morir en primavera.

Sobre el prepucio,  el nombre de la amada ya se borró...

Todos huían de nosotros,  sabían que el poema estaba cerca y no era heterosexual.

-Dale una patada a Betsy...,  me refiero a la pelota de Betsy...,  quiero decir que juegues con la perra...

-No he pasado del primer enunciado. ¡Cadáver, no me dejes quedar mal delante de tu amo!

La auténtica poesía es un beso lésbico entre medusas.

Poco a poco nos vamos acercando a esa locura que vocifera su lirismo por las calles y espanta a los viandantes.

Todos somos filo-bobos y pedagogos de esa patología.

La estupidez de los poetas les obliga a actuar como cheerleaders delante de los perros de presa.

Observa esas formas, el cubicaje, ese ojo de lechuza que babea lascivia, y ese ano de lavadora cuyo selector ha puesto en marcha el más hermoso de los desagües.

Los grandes poetas son los mejores sexadores de cefalópodos. Saben distinguir un hectocótilo de una vagina de calamar.

-¡Amada! El campo está lleno de flores y nunca fui un caballero. ¿Quién es capaz de aguardar tanto tiempo sin abrigarse y resguardarse?

-¡Amado! En tu espera, el esperma ha regado mi parteluz. Nuestro amor es el mismo que el de los maleantes que no dan por perdida la flor aunque haya gitanos en el castillo. Y, ahora, amor mío, haz soportable esa deshonra como soporto yo tu sombra.

La hermosura debe ocultar algo impropio entre las sábanas y apelar a esa conciencia.

En el lecho conyugal el paraíso está vagando, o virtualmente aburrido, o naturalmente roncando.

¿Qué existencia es capaz de amar sin perpetrar el crimen de lo amado?

Todos los perros poetas se complacen con los huesos y cualquier astilla de pollo les parece un fémur de bovino. ¡Oh,  vaca mía, te llevé a los altares y creí tener tus tuétanos hasta que el gallo cantó!

-Tiene usted unas ojeras impertinentes.
-Ojos que no follan corazón que no siente.
-¿No se le cansa la vista de tanto hacer el amor?

Alguien aseveró: no se pueden tener amigos pobres.
Alguien apostilló: ni ricos de espíritu con los bolsillos vacíos.