Yo
la amaba con mi falsa modestia canina, mastín de
los fiordos, y le habría dado un descendiente aventajado y subnormal
al que educaríamos en el lenguaje complejo de las truchas.
La
pajarera se transformaría en una cochiquera de literatura y
condones, con sangre de almadraba. ¿Para qué quieres alas de
infinito si no vuelas con la redención?
Yo
la amaba como un chucho advenedizo. Con los ojos ebrios de mundo
buscaba su pródigo pezón para lactar, aunque la humanidad entera
quisiera arrebatarme de su seno.
Eu amaba-a coa miña falsa modestia canina, mastín dos fiordes, e daría-lle un descendente avantaxado e subnormal ao que educariamos na linguaxe complexa das troitas.
A paxareira transformaría-se nun cortello de literatura e condóns, con sangue de almadraba. Para que queres ás de infinito se non voas coa redención?
Eu amaba-a como un chucho entremetido. Cos ollos ebrios de mundo procuraba a súa pródiga mamila para aleitar, aínda que a humanidade enteira quixese arrebatar-me do seu seo.
Atisbar al menos algo de tanta rareza y no sucumbir. Y perseverar.
ResponderEliminarBuen intento.
Lo realmente extraño es no sucumbir a la rareza, intentando preservarla.
Eliminar¿Para qué quieres alas de infinito si vuelas con la bajeza y te enrocas feliz como un parásito entre las nubes?
ResponderEliminarQuien se adentra en infinitos se adentra en la inercia del viento y las mareas y no puede salir de sus vaivenes. Parásito de nubes se alimenta de vapor de agua que no llega a solidificar
Qué me dices de las nubes sangrantes a poniente, contemplarlas es parasitar la infinitud. Demasiado elevados y ni siquiera tenemos conciencia de volar, sólo desde la finitud podemos adentrarnos y comprender el vaivén que alimenta el vapor. El poeta es un insecto vaporoso que se nutre de lo que nunca llega a solidificar, la materia inerte del alma.
Eliminaranoche vi un atardecer en la incongruencia de la relatividad del tiempo
Eliminaranoche salí de este cuerpo y estuve paseando por la estepas agrietadas de otra dimensión
anoche estuve observándonos mientras dormíamos
y una fuerza imantaba nuestra espalda
atraía nuestros pies
anoche estuve fuera
y fui leve
fui ligera
fui tan infinita que temí la eternidad
anoche volví a acurrucarme cerca de las pequeñas cosas
Me siento atraído por esa relatividad intemporal, por esa grieta de arena infinita en las pequeñas paredes que nos ancla a lo mortal e imperecedero de acurrucarnos.
EliminarMe he dejado llevar por la inspiración porque tu respuesta es como un hilo que se puede deshilachar o seguir hilvanando.
EliminarYo también me sirvo de las respuestas para la inspiración y la consecución del poema!!!
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